En estos días, al menos en mi círculo familiar, el mundo entero pareciera ocurrir entre la sala y la cocina. Así andamos, pues, trazando planes acerca de la comida semanal, compartiendo emocionados las fotos de cualquier cosa que cocinemos y luego contándonos con lujo de detalles las increíbles aventuras culinarias que nos llenan el día a día, llenas de todo lo que una increíble y más que épica aventura debería tener: drama, comedia, tensión, triunfos, derrotas, lágrimas, y todo eso.
Y es precisamente por esto mismo que me llegó la inspiración, así, de golpe, en un momento tan mágico que solo faltó una luz cayéndome desde el cielo y un coro de ángeles acompañando el momento. Con mis hermanas habiendo terminado de lanzarse cada una a preparar su propia versión de un chaufa de quinua (Con la infaltable compartida de fotos y video documentando todo), me di cuenta de que era inevitable que me una a la fiesta familiar. Tenía que preparar un chaufa, tenía que ser de quinua… y claro, tenía que curarme la intriga y ver qué tal encaja la quinua en un chaufa. ¿Conclusión? Simplemente, ¡Guau! Delicioso. Divino. Épico. Este es un plato que se ha ganado de golpe un lugar entre mis favoritos.
Ahora, si tuviera que ponerme seria y empezar a hablar de las ventajas de la quinua contra el arroz, diría que la quinua es un alimento mucho más rico en nutrientes y con un índice glucémico bajo, lo que va súper perfecto para personas con problemas de diabetes, y ya que estamos, en estos días es una excelente forma de disfrutar de uno de nuestros platos favoritos sin estarnos preocupando de si seremos capaces de entrar en nuestros pantalones dentro de unas semanas.
Consejo: podemos cambiar el pollo por langostinos, ternera o simplemente preparar una versión vegetariana apelando a un poco de tufu.
- Dificultad: fácil
- Raciones: 2

Ingredientes
- 1 taza de quinua (300)
- 1/2 pechuga de pollo (240 gr)
- 3 huevos
- 1 manojo de cebolla china o ajos tiernos.
- 1 cdt de kion o jengibre rallado
- 1 chorrito de salsa de soja (Puede variar la cantidad dependiendo de la sal que contenga la soja que estemos utilizando)
- 1 chorrito de aceite de ajonjolí o sésamo.
- 1 pizca de azúcar.
- Aceite vegetal según se necesite.
Elaboración
- En un cazo con suficiente agua hirviendo agregamos la quinua.
- Cocinamos hasta que esté al dente o los granitos de quinua empiecen a abrirse.
- Escurrimos con un colador y refrescamos con un poco de agua fría. Dejamos enfriar por completo.
- Potro lado, cortamos la pechuga en cuadritos y reservamos.
- Cortamos la cebolla china en pequeños bastones y reservamos. (1/2 centímetro aproximadamente)
- En un sarten caliente, agregamos un chorrito de aceite y agregamos los huevos medio batidos.
- Hacemos una tortilla que retiraremos y cortaremos en cuadritos.
- En la misma sarten, con chorrito de aceite salteamos los cuadritos de pechuga de pollo.
- Una vez esté listo, incorporamos la quinua y salteamos con ayuda de una espátula y un poco más de aceite si hiciera falta.
- Añadimos el huevo y mezclamos.
- Incorporamos la salsa de soja y el aceite de ajonjolí. (Seguimos salteando)
- Añadimos el kion o jengibre rallado
- Incorporamos la cebolla china y salteamos un minuto más, retiramos del fuego.
- Agregamos la pizca de azúcar y rectificamos el sabor.
- Servimos caliente.
- No sorprendemos de lo delicioso que está.