Un plato muy valorado de la región de Galicia, que es famosa por sus excelente carne, marisco y hermosos paisajes.
La receta realmente es muy sencilla, la magia de este plato la encontramos en la calidad de sus insumos y el pulpo en su punto, detalle que puede llegar a parecer complicado.
Investigando un poco, me enteré de que lo mejor es congelarlo un par de días y descongelando en el refrigerador un día antes cocinarlo.
Estó ayudará a romper la fibra y dejarlo suave a la hora de la cocción. Una tecnica sencilla que nos evitara darle los famosos golpes al pulpo.
Este plato, se suele servir con rodajas de papas debajo del pulpo, esto dependerá de nuestro gusto.
Raciones 6
Dificultad fácil
Ingredientes
1 pulpo (2 kilos)
1 cebolla blanca
pimentón dulce o paprika
Sal al gusto (se suele usar sal en escamas)
preparación
ponemos a hervir una olla con suficiente agua.
Cuando rompa a hervir, agregamos la cebolla partida en dos.
Una vez vuelva a hervir, cojemos el pulpo y lo intruducimos en el agua y lo retiramos tres veces.
Ponemos el pulpo en el agua y dejamos que hierva unos veinticinco minutos, le clavamos Un pequeño cuchillo para comprobar la cocción. esté debe clavarse con facilidad. (El tiempo de cocción puede variar según el tamaño del pulpo)
Retiramos la olla del fuego, dejamos reposar diez minutos.
Sacamos el pulpo, cortamos en rodajas según nuestro gusto.
Ponemos sobre una tabla o plato y le ponemos el pimentón, un poco de sal y un chorrito de aceite de oliva extra virgen.
Listo para disfrutar.